Siguió el viento,
la noche se vistió de rojo
la luna se retiro en el horizonte
Solo se escuchó
el llanto de los niños.
Desfilaron
imágenes de rojo púrpura.
El fuego quemó
la savia de la tierra,
despertando
los demonios del hombre.
Figuras fantasmales
danzaron
el baile macabro de la muerte.
Como demonios posesos
recorrieron las casas en busca de sangre.
Mordiendo con sus fauces
la calma del universo.
Sembraron el horizonte
del gris plomizo de la venganza.
Ni los dioses se apiadaron
de ti… Palestina.
4 comentarios:
como duele
que impotencia
que infamia y que tristeza
hasta cuándo?
hasta dónde?
un abrazo de luz
ojalá esa luz ilumine los corazones de los que ostentan el poder y el negocio de la guerra
Solo se escuchó
el llanto de los niños.
Desfilaron
imágenes de rojo púrpura.
El fuego quemó
la savia de la tierra,
despertando
los demonios del hombre.
Conmovedor y trist´simo
Qué impotencia se siente!
Jamás terminarán con la intromisión y la avaricia!
abrazos
beatriz
July:
De paseo por tu blog, del cual
me llamó la atención esta poesía...
De acuerdo contigo.
NO MAS VIOLENCIA EN EL MUNDO.
Saludos cordiales.
Duras son las palabras, porque duros son los hechos.Aún así, un hermoso poema, por lo que contiene, por lo que denuncia
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