jueves, 8 de mayo de 2008

El sueño






Día a día, camino a camino,
el silencio calma.
Una estrella pérdida en la senda,
un sol cambiado de sitio,
una luz que apagó su furia.
Un alma que murió en un cuerpo,
un cuerpo que perdió su alma.
Hombres que se ahogaron en desiertos de barro
donde se bañan las vidas.
Vidas que murieron sin gloria.
Un gorrión que expiró su canto
en un árbol fantasma de un bosque
petrificado por la historia.
Esa misma historia que extravió un libro
donde volaba un corazón partido,
enseñando un trozo de recuerdo.
Donde se leía, hoy caí en la oscuridad
de una madrugada que no supo
encontrar una razón para continuar,
lanzando diamantes sobre el mar.
Después me desperté Llorando.

1 comentario:

Unknown dijo...

En mi casa le espera un trocito de corazón y una migajita de mi alma.
Cuando un instante estéis perdidos… ¡os espera para que lo recojáis!